
En el lenguaje de los jeroglíficos egipcios, el águila representa la pasión vital, lo diurno, el origen. La existencia del ave altiva es a pleno sol; de ahí su parentesco con el aire, el fuego, y su asociación con la fuerza fecundante masculina, con la figura del padre. El águila atisba de un extremo a otro el horizonte, por lo que para los hititas es la divinidad solar omnisciente. Representa el triunfo y la potencia guerrera. El águila es también el ave imperial de los aztecas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario